En la primera ronda de los Test matches Argentina derroto a Inglaterra el pasado domingo, Francia hizo lo propio ante Nueva Zelanda y Australia , sin complicaciones, supero a Italia. Ante esta perspectiva abro un debate. En el cual de los dos más prestigiosos torneo deben ser incluidos los Pumas: Tres o Seis naciones.
Los pro y contra de porque si o porque no deben ser adheridos a alguno de estos dos torneo han sido escritos en distintos artículos y es una larga lista la cual no pretendo repetir en esta nota. Lo cierto es que los suramericanos tienen el potencial y nivel (quizás mas que Italia) para jugar en cualquiera de estos dos torneo, pero el hecho que es ahora que en el país Suramericano se empiezan a dar los primeros pasos hacia la profesionalización, se convierte en la “excusa” mas contundente para su exclusión. Y mas aun cuando, en este contexto, profesional es sinónimo de una amplia maquinaria capitalista que lo mueve todo, contratos, publicidad, medio y publico.
Ante toda esta polémica si deben ser incluidos o no, la cual parece no resolverse antes del 2010, me pregunto porque no crear una copa de Seis Naciones de América, la cual incluya también Chile, Uruguay, Estados Unidos, Canadá y al mejor de una copa en la que participarían los equipos del resto del continente, algo parecido a la copa europea de naciones.
Creo que un torneo como este atraería la atención de los medios, dinero y público principalmente hacia el continente suramericano donde solo se conoce el rugby puma y donde Argentina ha sido su voz durante décadas.
Pero significa este torneo un retroceso o desventaja para los Pumas, que intentan codearse con las principales potencias? Absolutamente no, porque este torneo apuntaría hacia la imperante necesidad de organizarse y asumir una posición definitiva hacia la profesionalización no solo en Argentina sino también en el resto del continente y ello permitiría una mejora en todos los niveles del juego, desde el rugby infantil, con la creación de escuela de rugby, hasta la primera división, incluyendo árbitros, entrenadores y dirigentes.
Quizás de esta forma, también, los ojos del IRB se enfocarían hacia el continente americano como un potencial mercado no solo financiero también de desarrollo.
Usted que opina, emita sus comentarios.
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