Hoy quiero hablar sobre la motivación, para mi es el combustible que permite que las personas hagan cosas. En el diccionario del uso del español actual, Clave, encontré que era la razón, causa o estímulo que impulsan a hacer algo. Definitivamente todos tenemos “ese algo” por dentro que nos mueve, por eso no puedo olvidar las palabras de un entrenador argentino, que me dijo mientras chateábamos, que sus jugadores no necesitaban motivación y que por lo tanto el no tenia que motivarlos, que el simple hecho de jugar al rugby era suficiente. Está él en lo cierto?
No se si yo esté equivocado, pero particularmente creo que cuando un equipo es ganador, o, en caso contrario, perdedor necesita motivación, el primero para seguir ganando y no perder y el otro para salir de la racha de derrotas y conseguir victorias. Los métodos para motivar son variados y depende de cada quien. Una vez escuche de un entrenador que ponía música en los entrenamientos. Creo también que es el entrenador quien debe encender ese combustible, promover, incentivar esa razón, causa o estímulo, que tienen los jugadores para que cada vez sean mejores individual y colectivamente. Como hacerlo no es fácil, yo he estado leyendo unos libros, que me han ayudado mucho, sobre la preparación y fortaleza mental de los jugadores de rugby y la motivación y seguridad en si mismo. Todos son factores muy importantes en la formación del rugbista y que los entrenadores no debemos dejar a un lado en el momento de preparar a los jugadores para los partidos.
Después de leer El libro de Bruce Hale y David Collins “Rugby Tough” me sentí un poco identificado con lo que he tratado de hacer, sobre todo en la última temporada cuando comencé a llevar “los números” de cada jugador en cada juego, para corregir las fallas. Aunque no escribí o seguí tan de cerca los goles individuales, fui un poco más colectivo y sólo hice hincapié individualmente cuando era algo ya muy grave, esto algo que debo corregir. El libro menciona en el capítulo dos la necesidad de una comunicación positiva, abierta, entre el entrenador y el jugador, evaluar de cerca el desempeño del atleta y establecer las objetivos o goles individuales para mejorar el rendimiento de cada uno. Este último es el primer paso para diseñar un plan de entrenamiento, el cual, idealmente, el atleta podrá desarrollar por si mismo. Y es allí cuando el jugador se motivará a mejorar, perfeccionará la técnica y ganará mayor confianza en si mismo y su desempeño será mucho mejor.
Mi motivación es la pasión y el amor que le tengo al rugby.
No comments:
Post a Comment